¿Qué es la empleabilidad?

Cuando hablamos de empleabilidad nos referimos a la capacidad que tiene un candidato de conseguir un empleo de calidad, mantenerlo y mejorarlo en el tiempo. Dentro de este concepto intervienen diferentes factores y circunstancias, tanto personales como contextuales, que determinan el nivel de cada candidato.

Para que una persona cuente con un alto nivel de empleabilidad, esta tiene que ser capaz de investigar, observar y adaptarse a las necesidades cambiantes del mundo laboral. Es aquí en donde entran a participar las variables individuales y contextuales que afectan a la empleabilidad y a la búsqueda de empleo: características sociodemográficas, acceso a recursos, salud y bienestar, cualificación y experiencia profesional, habilidades de búsqueda de empleo, etc.

Antes de analizar más en profundidad el concepto de empleabilidad es importante entender que no depende de una empresa o sector en concreto, sino de aquellas competencias y habilidades que cada persona va desarrollando a lo largo de su vida y se transfieren a cualquier área o rol profesional.

Claves de la empleabilidad en una empresa

La capacidad de ser empleable tiene que ser trabajada no solo por los candidatos que se encuentran en búsqueda activa de empleo, sino también por las compañías que tienen que fomentar la actualización y el aprendizaje continuo en su equipo.

Es en este punto en donde entran en juego estrategias como el upskilling, formación necesaria para lograr que el talento interno se adapte a las nuevas competencias requeridas por el mercado laboral actual, o reskilling, formar en nuevas competencias a los trabajadores de la plantilla ya existente para adaptarse así a las distintas funciones necesarias en la empresa. Estas competencias aumentan la competitividad y empleabilidad de los equipos.

Factores que afectan a la empleabilidad

• Elementos sociodemográficos: como edad, género, nivel de educación y el contexto económico.

• Estudios universitarios: También hay que tener en cuenta que hay carreras con mayor empleabilidad que otras.

• Experiencia profesional: La trayectoria laboral y la capacidad de poner en práctica lo aprendido en los estudios también es un factor que afecta a la empleabilidad de cada persona.

• Soft skills o competencias blandas: tienen un papel fundamental a la hora de determinar el nivel de empleabilidad de un candidato. El desarrollo de estas habilidades también aumentará las oportunidades de contratación en un proceso de selección.

• Marca personal: Un candidato debe de conocer su potencial como empleador, el valor que puede aportar a la compañía y tener ganar por trabajar para diferenciarse en el actual entorno laboral.

• Claridad en los objetivos: Un buen candidato debe tener fijadas unas metas que sean claras, realistas y específicas que tengan en cuenta sus inquietudes, perspectivas a corto y largo plazo, expectativas profesionales y salariales, etc.

• Límites claros: En relación con el punto anterior, cuando un candidato cuenta con unas metas y objetivos, establecer límites profesionales será mucho más sencillo. Tener claros los límites también determina el nivel de empleabilidad de un candidato.

• Red profesional. Los contactos que se conocen a lo largo de la trayectoria profesional también pueden ayudar a construir y mejorar la empleabilidad individual. Para ello, una muy buena opción es hacer uso de las redes sociales como LinkedIn que permiten gestionar y estar en contacto con profesionales del sector.